30 mil chicos no estudian ni trabajan
(diario uno)
Esa cifra abarca sólo al grupo comprendido entre los 18 y 24 años. Impulsan el programa Más y Mejor Trabajo.
21 de julio de 2009
Gastón Videla es uno de los inscriptos en el programa. Busca obtener el título secundario y ser profesor.
"Dejé de estudiar en octavo año y me puse a trabajar en la viña. Pero ahora quiero retomar los estudios porque me di cuenta de que el trabajo de la tierra es muy difícil, pasás frío, calor, son muchas horas y te pagan muy poco", explica Gastón Videla, lavallino de pura cepa. Este adolescente de 18 años que sueña con ser profesor de Ciencias Naturales es uno de los 30 mil chicos mendocinos de entre 18 y 24 años que no estudian ni trabajan. A ellos está dirigido el programa Más y Mejor Trabajo, que impulsa el Ministerio de Trabajo de la Nación coordinado directamente con los municipios. La idea es que mientras terminan su educación formal reciban capacitación laboral en alguna especialidad elegida por ellos mismos. El compromiso de cumplir con los estudios y la capacitación es retribuido con $150 por mes, pero deben asistir a las clases y rendir bien las materias. De lo contrario son eliminados del programa. Darío Navarra, director del Centro de Estudios e Investigaciones de Lavalle (CEIL), donde el programa está en plena instrumentación, explicó que "lo bueno de este programa es que les permite a los alumnos elegir si quieren seguir estudiando o trabajar. Para eso están las tutorías, que acompañan a los chicos en el proceso de seleccionar su taller y además, los contactan con empresas que los pueden incorporar a futuro". Navarra indicó también que en Lavalle este tipo de iniciativa tiene mucha incidencia, porque "el 50% de los chicos en edad escolar abandonan los estudios y al llegar a adultos desean volver a estudiar para mejorar sus ingresos".. A la par, Juan Chávez, jefe de la oficina de empleo de la Comuna norteña agregó que "acá el nivel de desempleo alcanza al 45% de la población. Este porcentaje fluctúa por supuesto en época de cosecha, pero durante el resto de los meses estas personas viven de hacer changas". Cómo funciona el programa Durante los dos primeros meses los inscriptos serán orientados para la elaboración de un proyecto formativo-ocupacional, capacitándolos en temas como la dinámica del mundo laboral, alfabetización digital e higiene y seguridad. Luego los jóvenes comienzan a estudiar nuevamente dentro del sistema formal educativo para finalizar los estudios primarios o secundarios. Con esta etapa cumplida, los chicos pueden optar por un curso de formación profesional, realizar prácticas en empresas o generar emprendimientos independientes. Dichos proyectos son también financiados por el mismo programa y disponen de $4.000 a $20.000 para cada alumno. Carlos Alberti, coordinador el área de Juventud, es uno de los responsables de contactar a los chicos con las empresas. Según su opinión, " los chicos vuelven a estudiar porque han captado que el mercado laboral cambió. Antes ingresabas de palabra, ahora no te subís a un tractor sin tener el certificado de tractorista, y ellos lo saben, por eso es importante". Funciona en 12 municipios El programa depende de la Red de Servicio de Empleo del Ministerio de Trabajo de la Nación y es bajado directamente a las comunas. Es financiado por un préstamo del Banco Mundial, pero no hay una cifra fija destinada, sino que los fondos son enviados en la medida que son incorporados. Actualmente, es aplicado en 12 de las 18 departamentos de Mendoza: Godoy Cruz, Guaymallén, San Martín, San Rosa, Las Heras, Lavalle, Tunuyán, General Alvear, San Rafael, Maipú, Tupungato y Malargüe. En el resto de los departamentos, el programa está en proceso de apertura. Diego Pettignano, titular de la Gerencia de Empleo filial Mendoza del Ministerio de Trabajo dijo que “en la provincia hay 30.000 chicos de 18 a 24 años que no estudian ni trabajan, más o menos el 20porciento de este grupo etario. La intención es llegar a cada uno de ellos que han sido excluidos del sistema por múltiples causas”. El programa en las empresas Si una vez terminada la formación, los chicos eligen hacer prácticas calificantes (pasantías), no puede exceder las 20 horas semanales de forma diurna y no superar los 6 meses. Una suma de $550 será pagada por la empresa si es grande. En el caso de una pyme, $150 son a su cargo y el resto lo pone el Ministerio de Trabajo. Cada 20 jóvenes habrá un tutor que los oriente y ayude en el desarrollo de su práctica. Una vez que termina la práctica, la empresa puede elegir quedarse con los jóvenes trabajadores. Cuando la empresa contrata a los jóvenes del programa es considerado como parte de la Responsabilidad Social Empresaria.
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